jueves, 30 de diciembre de 2021

LA VOZ QUE SIEMPRE QUISE 15

 

LA VOZ QUE SIEMPRE QUISE -15

 Ya sé la voz que deseo, la voz que dan las montañas,

 el rugir de aquel león en la pradera de España,

 ese sonido que daban al saltar de árbol en árbol

 las ardillas sin rozarse por los suelos desde el sur

 hasta los nortes de Francia, el de los toros mugiendo

 en libertad entre zarzas y olivos andaluces

 o también por Salamanca, los gritos que dio Cervantes

 en Lepanto en sus barcazas con la bandera en el brazo

 que le dejo una bombarda, la carga contra la muerte

 del regimiento de Alcántara, la voz del empecinado

 en las islas filipinas presentando la batalla,

 los de alegría de aquellos al tocar tierras lejanas,

 

Agustina de Aragón gritándole a los franceses

 ¡marchaos fuera de España!

 

Allá en la historia antigua los gritos que dio Viriato

 luchando contra soldados de las Legiones romanas,

 quiero tener la voz que gritó y aun que grita por lo nuestro.

 

Plutarco, Apiano de Alejandría, la defensa de Astapa,

gritos y voz de defensa como hubo en Intercatia

donde cientos de Vacceos luchan para deshacerse

 de enemigos de Numancia.

  

Cristo aún no había venido de la mano de su padre

 y se oía ya la voz precursora de lo justo por los límites de Iberia, 

 por sus ríos y sus valles rechazando a voz y a gritos

 la represión a quien nace del favor de los que siempre

 saben defender sus calles, el derecho a vivir libres

 regando de libertad en esta piel de toro que es

 nuestra casa y de todos los que se acerquen en paz.

  

El mundo lleva aún escrito en las pieles de la historia

la vergüenza de Morayma, de los alcaides que fueron

de Albaicín y de otras plazas en manos de medialuna,

 o la frase ya recordada por todos en labios de Aixa

 aunque fuerase inventada por un fraile de Guevara,

 “llora como una mujer ya que no has sabido defender

 tu Reino como un hombre”

 palabras que duelen dentro aunque hayan divertido

 a la realeza en la estancia de la Alhambra

por el “Suspiro del moro” que está en esta piel de toro

 que se fueron diluyendo en lágrimas de Boabdil

 entregándonos Granada.

 

Ya sé la voz que deseo, la voz que dan las montañas,

 el rugir de aquel león en las praderas de España.

 

 

Chema Muñoz ©

 

Al Final de la Pagina Todos los Audios de Los Poemas

Indice Aqui  

Pagina Principal Aqui

No hay comentarios:

Publicar un comentario